lunes, 31 de octubre de 2016

A propósito de una fotografía

José Luis Miñambres, escritor, crítico literario, amigo y seguidor de estas páginas, nos remite desde León un pequeño comentario relativo a la última fotografía incorporada a nuestra sección La imagen del mes

UNA MIRADA DEL ALBA…¿DE LOS CINCUENTA?
No lo sabemos. Tal vez viva aún el niño que ocupa la primera imagen de la foto. Vestido de fiesta, con su abrigo elegante, de solapas, y sus calcetines blancos…mira hacia el fondo, hacia Salamanca. A lo mejor va de viaje, por eso muestra tan clara su alegría. 

Más atrás, más al fondo, contemplamos el grupo humano, el bullicio de la vida, de los viajes, de los transportes mecánicos. Se ve un camión y, tal vez, un remolque, o un segundo camión, quién sabe. Es extraño, pero no aparecen los coches de Moreno de Vega, tan de Alba, tan de viaje.

Tras del grupo humano, abundante y heterogéneo, se observan las fachadas de las casa, con sus tejados y con un cartel de “Diógenes”. Un poco más lejos, un recio poste de la luz anuncia la modernidad de la villa. Es curiosa sin embargo la mirada. En la derecha no aparece el Torreón de Alba ni el cartel de “La Perdiz”. Tal vez fueron problemas de objetivo fotográfico. En justa correspondencia tampoco se refleja la bajada de San Pedro y su torre, ni la Posada del tío Liberto. 

Más lejos, al fondo, aparece la villa en perspectiva, sobre la loma inclinada de su emplazamiento. Tras las casas, el símbolo de Alba: la torre del homenaje del castillo, recia, erecta, casi provocadora. Detrás de ella, sólo cabe el cielo azul, el día claro que, en el extremo inferior de la foto, refleja en el puente, la sombras de los árboles.

No se puede pedir más: la foto es toda una metáfora de la vida de Alba, de sus gentes, sus casas, sus monumentos…Todo ello formando la bellísima progresión fotográfica de la vida. 

No estaría de más saber quién es el niño de los calcetines blancos y el abrigo de solapas. Si vive y ve la foto, seguro que mira con nostalgia la vida. O con tristeza.

José Luis Miñambres
León, 30 de abril de 20016

1 comentario:

  1. Buenos días, Gerardo Nieto:

    Me encanta cuando alguien expresa “en voz alta” lo que le dicta el pensamiento, como en la estupenda descripción que hace el detallista conocedor de Alba.
    A mí, en la fotografía -en principio-, me llamaron la atención los camiones. El oficio de mi padre era carrocero y seguramente haría trabajos como los que se ven.
    Gracias por hacernos recordar.

    Saludos.

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